11 marzo 2008

El juicio II

En este punto de la historia ya habían pasado un par de días y el entusiasmo del principio se había convertido en aburrimiento y ganas de zanjar el tema por lo que muy diplomático ya no estaba.

-Hola, buenos días, mi nombre es Alexander Rodríguez (sería estúpido no identificarme ante quien tiene mi identificación) creo que algo de mí ya conoces. En todo caso me gustaría discutir contigo cómo podemos quedar para que me devuelvas mi teléfono.

-Yo no sé nada.

-(No sé nada de qué pedazo patán!!, con el tiempo me demostraría lo cierto de sus palabras) Bueno, como quieras, te repito que sé que lo tienes tú y que me gustaría recuperarlo. En la bolsa había unos diez euros y, con suerte, otros dos en calderilla que te puedes quedar si lo necesitas pero el teléfono y la documentación me gustaría recuperarlos.

-A mi no me cuentes historias de teléfono ni teléfono (Click).

Dios mío, es un hombre que domina la dialéctica!!!, necesito más sabias palabras.

-Hola, que parece que se ha cortado, en cuanto a lo del tema del teléfono…

-Mira chaval, no me toques los cojones que estoy trabajando y me vienes con…

-Mejor mira tú, he estado dando vueltas y esperando para hablar contigo antes de ponerte la denuncia. Como quieras, pero no voy a esperar más.

-GHHXXFFF!!!

-Ok, ¿seguimos entonces adelante con tu denuncia?

-XXHHGFGHXHGDASSGFFF!!!!!!!!!

-Perfecto, nos veremos entonces, buenos días.

Joder, lo último que me imaginaba es que ese “nos veremos” iba a ser tan cierto.

Bueno… ¿qué hacemos ahora?... no debería seguir torturando a la chica, pero para una vez que me encuentro en el lugar del inocente de… bueno… de cualquier cosa, pues habrá que aprovechar.

-¿Hola? Soy Alexander. (A ver si lo consigo…)

-Ah, hola Alexander, ¿has conseguido hablar con… este?.

-(Siiiiiiii, ha ha ha haaaaa, lo que he conseguido es que me llames Alexander, que no sé por qué extraño motivo el que una mujer me llame por mi nombre completo me pone chotuno). Pues eso quería comentarte, he conseguido hablar con él, un tipo muy desagradable por cierto que me ha faltado al respeto y que, ciertamente, lamento que estés relacionada con él de algún modo.

-… si … yo también… lo… lamento?

-He intentado razonar con él y me ha negado todo, así que tengo intención de ir hoy a poner la denuncia y olvidarme del tema. No sé si quieres intentar una última cosa antes de ponerla …

-Si, por favor

Ese mismo día me fui a ver un concierto de guitarra clásica a Zarautz, y entre pintxo y vino me llama la mujer atormentada y me dice que puedo recoger el móvil en una tienda de Orange de la calle Matía. Chachi piruli, le llamo a mi compañero de piso Ekaitz y le dejo el muerto de ir a por él, muy bien. Ekaitz va y Ekaitz me llama.

-Hola chato.

-Hola salao.

-Que ya tengo tu móvil.

-Fenomenal.

-Pero está roto.

-¿Cuán roto?

-Mucho.

-Cáspita.

Esa noche cuando veo mi móvil una lágrima cae por mi mejilla al suelo de la cocina, entre dos baldosas, de donde como por arte de magia sale un brote, un sauce llorón que se lamenta desconsoladamente abrazado a mí.

El siguiente sábado por la mañanita como no tenía nada mejor que hacer me fui a poner la denuncia, esto no es una gracieta, realmente lo último que me podía imaginar es que esa denuncia diese algún tipo de fruto; la única razón fue la de evitarme posibles problemas por un uso indebido de mi identificación y porque disponía del tiempo necesario para hacerlo.

Ya en las dependencias de la ertzaintza comienza el jolgorio; entro y le digo al fulano que guardaba la entrada:

-Hola.

-Si.

-Vengo a denunciar el robo de una cartera con mi documentación.

-Muy bien, ¿Me permite el DNI?.

-¿?¿¿!!!!!

No voy a comentar nada al respecto… más que nada porque creo que es delito llamar imbécil a los guardianes de la ley y el orden.

Mientras esperaba pude cotillear cómo una chica embarazada y su pareja iban a recoger al hermano de ella, por lo visto el artista se agarró un cepillo de escándalo la noche anterior, se lió a patadas voladoras con alguno y a pasar la noche calentito al calabozo. Me quedé con unas ganas terribles de ver al fenómeno.

Aparece una mujer atractiva (de lejos) y me pide que la acompañe. Digo lo de “de lejos” porque tenía dominado un bonito efecto óptico: cuando nos acercamos a un objeto lo vemos primero pequeño y poco a poco más grande, pues la damisela se veía grande y poco a poco enorme. Lo curioso es que tenía unos rasgos bonitos, lo que fallaba eran la espalda de remero y las manos de pelotari.

Nos metemos en una habitación donde reflexiono en voz alta:

-Qué curioso eh?, creo que Donosti es la única ciudad del mundo donde en todas y cada una de las oficinas hay una foto de… Donosti, es más, me aventuro a decir que en el 95% salen el peine de los vientos, la concha o ambos.

-Si.

Chachi, y todo esto porque no ponen nada bueno en la tele.

La mujer amable pero un poco tosca en sus maneras me va preguntando por lo sucedido a lo que yo respondo, poco a poco me voy calentando y es que lo de contar películas como que me entretiene mucho… vamos, que sólo faltaba en mi historia batman y la cura contra el cáncer en manos de una malvada farmacéutica. Acabo haciendo una relación de los efectos sustraídos y me siento totalmente ridículo por no atreverme a decirle que también había en la bolsa dos condones.

-Me dices entones que un móvil sonny ericcson w610i.

-Si señorita, valorado en nada menos que doscientos euros mireusté.

-Vaya vaya, ¿Algo más?

-Si, dos condones de los de poner en el pito para hacer ñoco ñoco.

-Por Dios, cómo está el mundo, ¿En cuanto lo valora?

-Pues un par de euretes, valor sentimental no tenían porque estaban si usar.

Seguimos con una charla agradable y pa casa, en fín, parece que aquí acaba la historia, móvil recuperado, roto pero en mis manos, y adiós documentación…

2 comentarios:

Anónimo dijo...

MAs, masssssssssssssssssss

Tirso

krtx dijo...

Algún día... mejor dicho... alguna noche que andemos de borrachera, y seguramente sin tan siquiera verlo venir, el mangarrán este se plantará ante nosotros y gritará:
- ¡Síííiiii! ¡Yo soy el que te jodió el movil!
Entonces el cielo se abrirá, y un coro de ángeles descenderá de él entonando el Aleluya! mientras nosotros inflamos a palos al mandril ese de mal perder.

Una canción para la ocasión. Cantemos todos para aliviar nuestros escrotos:

http://songza.com/z/fvhgoa

(y aquí la letra)

http://www.quedeletras.com/letra-cancion-hijoputa-bajar-6304/disco-naces-creces-te-jodes-mueres/mama-ladilla-hijoputa.html