Trabajar de informático... pues creo que sólo me he sentido satisfecho escasos tres meses. Si todo hubiera sido como esos tres meses diría que es una profesión bonita (hablo por supuesto de mi experiencia), pero lo que más he vivido es el estar obligado a trabajar de forma chapucera, mentir al cliente, explotar al programador, horas extra no pagadas, no sentirme considerado ni realizado... no, no es algo que uno vea para sí durante el resto de su vida.
He juntado cuatro ideas y he montado un podcast el cual se supone que es mi muestrario de voces. ¿La intención? hacer locuciones y, si sale, algún que otro doblaje. Ya he comprobado que mandar muestras a bases de datos de locutores no sirve de nada, y que si te presentas con las manos vacías no te hace caso ni Rita... me da también un poco de vergüenza la actitud de la mayoría de los estudios:
-Hola buenas días, soy locutor y...
-Buffff es que la crisis, menuda crisis que hay.
-Si, pero le traigo este CD con unas muestras...
-Terrible, ¿eh? no hay trabajo ninguno, ninguno.
-Ya, bueno, entiendo, pero quizá podríamos...
-Antes había poco, pero es que ahora nada de nada.
-Gracias.
Vale que hay crisis, pero parece que la actitud dominante es la de hibernar hasta que el temporal escampe por sí solo.
Volviendo al tema, el podcast este... la idea es tener algo "vivo" así que iré grabando cuentos y relatos clásicos (libres de derechos) y, donde creo que está la gracia, textos de gente anónima.
Es bastante típico el que un padre le escriba un cuento a su hijo (o se lo invente sobre la marcha). Pues yo lo que ofrezco es grabárselo. Esto sería totalmente imposible a precio de estudio, ponle que el cuento dura 15 minutos, a unos 50 leuros el minuto pues saldría la cosa a 750 leuros. Va a ser que no, pero si el cuento o relato está ligeramente adaptado para que pueda sustituir los nombres de los protas y los sitios donde transcurre por otros bajo petición, entonces la minuta se reparte entre mucha gente y sí es factible el grabarlo, y el que alguien tenga un audio así de chuli a medida.
Esta es la idea, por supuesto no con miras de sacar un sólo euro, sino como mera promoción. Cuanto más presente esté la voz más fácil es luego una contratación.
La promo la han puesto hoy por primera vez en Gravina82, con lo que imagino que durante los próximos días habrá una subida importante de visitas, después de eso tengo que buscar otros sitios donde meter la promo, que por cierto es esta:
Si, ya sé, almibarada a más no poder, pero sinceramente es lo que tengo en mente y me parece bonita.
Ahora estoy buscando formas de publicar audiolibros para la venta. Estudiando cómo funciona la mierda del tema de los derechos. Lo bueno de esto es que sería un "Yo me lo guiso, yo me lo como" a excepción de la distribución, que sería a través de plataformas tipo iTunes o Audible.
¿Por qué te cuento todo esto? porque tengo la cabeza loca, no tengo ni idea de si esto va a llegar a buen fin y estoy cansado de hablarlo con gente y que me digan "seguro que te va genial" cuando no hay ningún indicio de ello o que no me digan nada y me quede yo todo jodido pensando "qué cabrón, no me ha dicho nada".
Pues sí, quiero que me vaya bien, pero no hay forma de saberlo. Como tantas cosas en la vida, solo queda esperar y hacerlo lo mejor posible... lo cual es bastante desesperante... pero si no sería fácil, y si fuera fácil ya estaría hecho, ¿no?
Otra cosa que quiero hacer es empezar a escribir algún relato con cierta sustancia para grabarlo. Tengo una cosilla en el tintero, pero como va para un concurso de radio nacional pues no lo voy a poder grabar y publicar, una pena, pero el que saliera algo de ese concurso estaría muy bien, si.
Es de estilo de mi vieja escuela, el Alex fresquito de 16 años, el que busca el miedo en una peli y cuando lo encuentra lo abraza como un tesoro.
No quiero imponerme el producir textos cual vaca lechera, ya que otras veces que lo he intentado no ha funcionado, al menos no durante mucho tiempo. La idea es que cuando algo se materialice de forma expontánea lo cace al vuelo, como cuando vas por la calle y ves una camisa muy chuli y te la compras, en vez de ir de tiendas porque necesitas ropa.
Y con esto y un bizcocho, me piro planchar la oreja.
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